DECLARACIÓN INSTITUCIONAL DE LA XUNTA DE GALICIA CON MOTIVO DEL DÍA EUROPEO CONTRA LA TRATA DE PERSONAS

Con motivo del DÍA EUROPEO CONTRA LA TRATA DE PERSONAS, que se conmemora el 18 de octubre, el Gobierno gallego quiere expresar un año más el profundo rechazo a la esclavitud de nuestro tiempo y, lamentablemente, a una realidad en Europa y en nuestro país.

Supone una profunda violación de los derechos humanos, de la dignidad y de la libertad de la persona y constituye una forma de delincuencia grave. La trata de ser humanos está expresamente prohibida por la legislación internacional y europea vigente, y penalizada como delito grave en nuestro Código penal.

La trata de ser humanos con fines de explotación sexual sigue siendo la principal forma de trata en la UE, pues según reflejan las estadísticas, el 67% de las víctimas de este delito fueron explotadas sexualmente, y de ese porcentaje, el 95% son mujeres y niñas.

Con estos datos, queda de manifiesto que la trata de ser humanos con fines de explotación sexual no es un crimen neutral en términos de género pues la mayoría de sus víctimas son mujeres y niñas, constituyendo además una forma de violencia contra las mujeres.

En Galicia se aprobó la Ley 12/2016, de 22 de julio, por la que se modifica la Ley 11/2007, de 27 de julio, gallega para la prevención y el tratamiento integral de la violencia de género, precisamente para poder ampliar los derechos de las víctimas de trata con fines de explotación sexual que sufran este delito en nuestra Comunidad Autónoma, que adquieren así la condición de beneficiarias de las ayudas económicas periódicas previstas para las víctimas de la violencia de género en Galicia.

Además nuestra Comunidad es pionera en la implicación de la Administración autonómica en la lucha contra esta lacra, con la firma en enero de 2010, y actualizada en 2012, del protocolo entre la Fiscalía Superior de Galicia y la Xunta de Galicia sobre la adopción de medidas de prevención, investigación y tratamiento a las mujeres víctimas de trata con fines de explotación sexual. Las últimas reformas legislativas en el marco del Estado español y el vigente Protocolo marco de protección de las víctimas de trata de ser humanos, configuraron un impulso vital en la persecución de este delito y en el apoyo y protección de sus víctimas.

Todos los datos apuntan además a que y trata, la prostitución y la explotación sexual, en cualquiera de sus manifestaciones, se encuentran fuertemente interrelacionadas entre sí. Son muchos los instrumentos internacionales que inciden en esta doble cuestión.


Por eso, dentro de la violencia de género y de la desigualdad en general entre hombres y mujeres, la trata con fines de explotación sexual, la prostitución y otras formas de explotación sexual tienen una especial gravedad, pues suponen la reducción máxima de una persona a un mero objeto, y la persona reducida la esta condición está expuesta a un trato vejatorio e incluso violento.

Desde el Gobierno gallego con motivo del Día Europeo contra la Trata de Personas, ponen en marcha una campaña de sensibilización social con la finalidad de seguir concienciando a la sociedad en la lucha contra esta lacra, bajo el lema:

LA TRATA CON FINES DE EXPLOTACIÓN SEXUAL DENIGRA Y DESTROZA LA VIDAS DE LAS MUJERES.

Consideramos necesario sensibilizar e informar sobre la terrible realidad que hay detrás de la trata de mujeres. Cuando se paga por sexo están pagándose redes de extorsión, vejaciones y torturas y se es cómplice de la peor de las esclavitudes y las lacras del siglo XXI. La trata de ser humanos es una de las vulneraciones más abominables de los derechos humanos, en los que la persona pasa a convertirse en una mercancía.

La trata con fines de explotación sexual supone, además del anterior, una manifestación execrable de violencia contra las mujeres.


El Gobierno de la Xunta de Galicia se reafirma, por una parte, en su clara y decida condena la esta grave violación de los derechos humanos, cualquier que sea su forma y muestra su firme compromiso en la prevención y en la lucha contra la trata ser humanos, haciendo especial hincapié en el apoyo incondicional a las víctimas, que tienen una especial incidencia en un alto porcentaje mujeres y niñas.

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